antiinflamatorios esteroides más potentes de que se dispone en la actualidad. Pueden administrarse por vía oral o parenteral, aunque siempre que sea posible debe utilizarse la primera. La acción de los glucocorticoides sobre los procesos inflamatorios no se realiza de forma aislada, sino que más bien resulta de la suma de efectos sobre los vasos sanguíneos, leucocitos, efectos inhibidores sobre los fibroblastos, etc. Todos los preparados glucocorticoides tienen efectos indeseables parecidos, que en general se relacionan tanto con la dosis total diaria como con la duración del tratamiento. Entre otros efectos producen: disminución de la resistencia a las infecciones; cambios del aspecto físico, como alteraciones en la distribución de la grasa corporal; piel quebradiza; debilidad de la musculatura, sobre todo en la cadera y hombro; retención de sodio; aumento del nivel de glucosa en sangre, etc.
